Ni crucigramas ni sudokus: este es el juego recomendado para los mayores de 65 años que ayuda a estimular la memoria
Se trata de un pasamiento pensado para niños y jóvenes, capaz de activar regiones cerebrales clave en el buen funcionamiento mental.
Con el paso de los años y la inevitable llegada de la vejez, la salud de las personas mayores se convierte en un factor fundamental, objeto de numerosos cuidados y tratamientos que tienen como objetivo hacer de la vida de los afectados una mucho más longeva y tranquila. Así, la memoria se establece como uno de los aspectos más importantes y que más quebraderos de cabeza pueden traer consigo.
La memoria es una capacidad fundamental de todo ser humano. Permite recordar nombres, momentos concretos y experiencias pasadas. Sin embargo, el pasar de los años tiende a generar un declive en ella, el cual se hace más presente a partir de los 65 años. A partir de ese momento, los afectados pasan a tener problemas para recordar sucesos que, hace apenas unos años, evocaban con suma facilidad.
Aunque sea un proceso que forme parte del envejecimiento natural de todos los seres humanos, la ciencia contemporánea afirma que, ante la pérdida de la memoria, no todo está perdido y que existen varias formas de ralentizar este deterioro y mantener la memoria en el mejor estado posible.
Siempre se ha hecho referencia a los crucigramas y los sudokus como dos de las mejores herramientas para entrenar la mente, mantener el cerebro activo y ponerle freno al paso del tiempo. No obstante, no son las únicas, ya que existe otro juego que, a partir de la concentración, la memorización o la creatividad que requiere, desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de una buena memoria.
Un juego al alcance de todos
Es uno de los pasatiempos que más beneficios ofrece a nivel mental y que, además, está al alcance de todos: se trata del cubo de Rubik. Según cuenta ‘PudMed’, este juego no solo es considerado como un desafío para niños y jóvenes, sino que también se establece como la herramienta perfecta con la que las personas mayores pueden ejercitar su mente y su memoria.
Jugar con un cubo de Rubik implica la activación de distintas áreas cerebrales como la corteza prefrontal, el lóbulo parietal y el hipocampo, todas ellas regiones que guardan una estrecha relación con varias funciones cerebrales, tales como la memoria, la planificación, la orientación espacial y la resolución de problemas.
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