Barrul, KO y cinturón de España del peso supergallo
El leonés se proclamó campeón tras noquear en el segundo asalto a Raúl Zabala ayer en el Palacio de los Deportes de León.


León volvió a tener un campeón de España desde que Saúl Tejada lo perdió en 2016. Antonio Barrul (8-0-0, 4 KO), la estrella local por excelencia, se ciñó el cinturón nacional del peso supergallo anoche tras noquear a Raúl Zabala (8-4-0, 4 KO) en el Palacio de los Deportes ante todo su público en una velada que fue una fiesta. El público se volvió loco con su nuevo monarca.
Barrul es una de las grandes promesas del boxeo. Aunque su nombre saltó a la fama después de que defendiese a una mujer que estaba siendo maltratada por su pareja en un cine delante de sus hijos, una acción que le convirtió en todo un héroe y un referente para muchos, sus habilidades en el ring y su palmarés (ha sido seis veces campeón de España amateur), le ponen como una de las grandes promesas nacionales.
Tras una gran promoción para anunciar el combate, recorriéndose ambos boxeadores todo León y visitando con el cinturón los lugares más emblemáticos de la ciudad, el hype estaba por las nubes y nadie quiso perderse el gran encuentro. Antonio se hizo rápido con el control del centro del cuadrilátero y no tardó en lanzar las primeras manos, muy amenazante. Salió con todo. Conectó un buen golpe que puso a Zabala contra la esquina, donde siguió conectando golpes hasta que su oponente pudo salir. Raúl intentó encontrar su distancia, pero Barrul siguió atropellándole.
Zabala se mantenía precavido, con la guardia subida, desplazándose ante los ataques del boxeador local. Barrul insistía con el jab, haciéndole retroceder y trabajando con la izquierda, trabajando arriba y buscándole el cuerpo. En el segundo asalto, cuando parecía que Raúl había metido una marcha más, lanzando una combinación de manos, Antonio coló una izquierda que le cazó y le mandó a la lona, dejándole totalmente planchado en el suelo. Zabala se intentó levantar, tambaleándose, pero su esquina tiró la toalla mientras el leonés ya celebraba saltando en la esquina.

Antonio dio una de sus clásicas volteretas cuando vio que esa caída había supuesto su triunfo. El equipo del local invadió el ring, subiendo a su boxeador a los hombros, llevándolo en un tumulto de gente que no podía contener la alegría de tener nuevamente un campeón de España en la ciudad. Se lleva así el cinturón del supergallo que dejó vacante Jordan Camacho cuando se proclamó monarca EBU Silver. No pudo ser para Zabala, que asaltó por tercera vez el Nacional. León será una fiesta estos días.
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