Lágrimas de bronce: Laura Martínez sube al podio
La madrileña, a la que se le escapó la medalla en los Juegos de París (-48 kg), logra su mayor éxito internacional.


Laura Martínez, por fin, pudo llorar a gusto. De felicidad y no de rabia, abrazada a su maestro Quino Ruiz. Lo hizo tras lograr la medalla de bronce en los Mundiales de Budapest (Hungría), en -48 kg. En un combate trabado ante Sabina Giliazova, séptima del ranking, dos puestos por encima de ella, que se decidió al final antes de tiempo al recibir la rusa una tercera amonestación (shido).
La madrileña, de 26 años y novena del mundo, sabía lo que es subir al podio en los Mundiales júnior (bronce en 2018 y plata en 2017). Pero nunca lo había logrado a nivel sénior mientras sus compañeros del Dojo Quino, en Brunete, como Fran Garrigós o Niko Sherazadishvili se colgaban medallas al cuello durante los últimos años. En los Juegos de París tuvo cerca el bronce, pero fue un casi que se esfumó en el combate por el podio con la sa Shirine Boukli.
Martínez, bronce en los Europeos de 2023 y que había perdido en semifinales por shidos frente a la kazaja Abiba Abuzhakynova, logró así su mayor triunfo en un Mundial en el que dejó por el camino a la sueca Babulfath, actual bronce olímpico y mundial. Todo lo que llevaba guardado dentro se transformó en lágrimas. Por fin.
Eva Pérez (-48 kg) y Fran Garrigós (-60 kg) cayeron a las primeras de cambio y Luis Barroso pasó una ronda. Este domingo, turno para Ariane Toro y Ayumi Leiva (-52 kg) y David García Torné y Adrián Nieto (-60 kg). Por Judo TV con combates por las medallas desde las 18:00 horas.
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