Un mercado en ‘stand by’
El club espera el ingreso por Joan Garcia y la ampliación de capital para volver a la regla del 1:1 y encarar el mercado con garantías. El verano pasado no se gastaron ni un solo euros en traspasos
Fran Garagarza encara un verano decisivo en clave perica. Con 13 jugadores con contrato, deberá firmar a una cantidad importante de futbolistas para confeccionar una plantilla que luche por quedarse un año más en Primera. Con Manolo González a la cabeza, el Espanyol debe reforzarse en todas las posiciones si quiere, por lo menos, tener opciones de salvar la categoría. Pero todavía no puede hacerlo.
El club blanquiazul está a la espera de dos acontecimientos que han de cambiar completamente el panorama económico, y por lo tanto de fichajes, de la entidad perica. Por un lado están a la espera de que el Barça abone los 25 millones (más el IPC) de la cláusula de Joan mientras que por otro se está pendiente también de que se consume la ampliación de capital de hasta 38 millones de euros. Estos dos condicionantes, que se darán en los próximos días o semanas, han de devolver al club a la regla del 1:1 y permitir a Gargarza encarar el mercado con una solvencia inédita en las últimas temporadas.
Pese a ello esto no significa que el Espanyol vaya a tener un margen de maniobra enorme para fichar. La ampliación de capital es una exigencia de la Liga para alejar la causa de disolución y es, al fin y al cabo, una capitalización de la deuda. De los 25 millones de Joan, que estos sí son una entrada de dinero neta al club, 15 están presupuestados ya esta temporada para cuadrar los balances. Es decir, en el mejor de los casos, el Espanyol dispondrá de unos 10 millones de euros para hacer frente a un mercado clave para el futuro inmediato del club.
Pese a que desde las altas esferas del Espanyol se insista en que Rastar Group nunca ha dejado de invertir en el club (algo que técnicamente es cierto) la realidad es que Rastar no ha hecho ninguna aportación de capital extraordinaria que permita al Espanyol afrontar fichajes que hace algunos años sí eran posibles. Una situación que se suavizará este verano, especialmente en relación al anterior, donde el club no se gastó ni un solo euro en traspasos: solo llegaron cedidos y jugadores libres.
La principal novedad es que en esta ventana, además de cedidos y jugadores libres que seguirán llegando, el Espanyol sí tiene margen para fichar. Dejará de estar tan excedido en el límite salarial y podrá afrontar alguna operación, relativamente modesta, para reforzarse. Y aquí hay dos posiciones clave donde podrían destinar el dinero: la delantera y la portería. Retener a Roberto es el principal objetivo y para ello se deberá abonar una cantidad al Braga. No los 10 millones de euros que se estipulaban en la opción de compra (inasumible) pero sí una cantidad cercana a la mitad, por lo menos, por una parte de sus derechos. La segunda es la portería, donde la marcha de Joan deja un hueco difícil de cubrir con un portero de su nivel. Sea como sea, y más teniendo en cuenta que los fichajes no computan enteros sino que se amortizan, este verano si que hay margen para fichar. Una bendición para Garagarza.
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